sábado, 24 de agosto de 2013

GUERRAS MEDICAS

GUERRAS MEDICAS.

Como siempre dicen, toda acción tiene una reacción, y este fue el caso para un hecho significativo que cambiaría el rumbo del mundo entero, las famosas Guerras Medicas. Esto comenzó en el siglo VII a.c se encontraba en la soberanía Darío I, sucesor de Ciro, gobernó las ciudades griegas con tacto y procurando ser tolerante. Pero, como habían hecho sus antecesores, siguió la estrategia de dividir y vencer: apoyó el desarrollo comercial de los fenicios, que formaban parte de su imperio desde antes, y que eran rivales tradicionales de los griegos. Además, los jonios sufrieron duros golpes, como la conquista de su floreciente suburbio de Naucratis, en Egipto, la conquista de Bizancio, llave del Mar Negro, y la caída de Síbaris, uno de sus mayores mercados de tejidos y un punto de apoyo vital para el comercio.
Y de esta manera se dio el resentimiento contra el gobernador persa, y por ende se libró la primera guerra médica. Darío I se decidió a castigar a aquellos que habían auxiliado a los rebeldes. Según la leyenda, preguntó: « ¿Quién es esa gente que se llama atenienses?», y al conocer la respuesta, exclamó: « ¡Oh Ormuz, dame ocasión de vengarme de los atenienses!». Después, cada vez que se sentaba a la mesa, uno de sus servidores debía decirle tres veces al oído « ¡Señor, acordaos de los atenienses!». Es por esto que encargó la dirección de la represalia a su sobrino Artafernes y a un noble llamado Datis.
La derrota de los persas se debió a dos factores fundamentales. Uno era la organización estratégica persa, que hacía combatir a sus hombres agrupados por nacionalidades, no por armas, lo que debilitaba militarmente a sus fuerzas pero era necesario para mantener la disciplina en un ejército que combatía en su mayor parte (con la excepción de medos y persas propiamente dichos) para un monarca invasor de su propio país, invadiendo otro país extraño. El segundo y no menos importante, consistía en que los griegos, al contrario de sus enemigos, estaban animados por un patriotismo muy poco conocido en aquella época, alimentado sobre todo por los logros políticos de la democracia ateniense, hija de las reformas de Clístenes, que hacía de los ciudadanos de Atenas hombres especialmente libres y con derechos políticos, en comparación con los súbditos de otras naciones organizadas, regidas casi todas por déspotas absolutos.
La derrota de los persas se debió a dos factores fundamentales. Uno era la organización estratégica persa, que hacía combatir a sus hombres agrupados por nacionalidades, no por armas, lo que debilitaba militarmente a sus fuerzas pero era necesario para mantener la disciplina en un ejército que combatía en su mayor parte (con la excepción de medos y persas propiamente dichos) para un monarca invasor de su propio país, invadiendo otro país extraño. El segundo y no menos importante, consistía en que los griegos, al contrario de sus enemigos, estaban animados por un patriotismo muy poco conocido en aquella época, alimentado sobre todo por los logros políticos de la democracia ateniense, hija de las reformas de Clístenes, que hacía de los ciudadanos de Atenas hombres especialmente libres y con derechos políticos, en comparación con los súbditos de otras naciones organizadas, regidas casi todas por déspotas absolutos.
Pero esto no fue todo ya que faltaría la segunda guerra medica esta vez comandada por el hijo de Darío I, Gerges, y por consecuencia una tercera guerra medica En este momento Temístocles es mal reconocido por el pueblo ateniense y es exiliado, de modo que huye a las fronteras del Imperio aqueménida, y allí se pone bajo el mando del nuevo soberano persa, Artajerjes I, hijo de Gerges ya fallecido.
Cimón, hijo de Milcíades, enterado de las intenciones de Artajerjes I, avanza hasta la actual Turquía y derrota al ejército persa en la batalla del río Eurimedonte en el 467 a. C.
Tras esta gran victoria, Cimón decide que se debe de nuevo promulgar la amistad y paz con el pueblo espartano, pero los atenienses no consideran esa opción de igual manera y los destierran por orden de Efialtes, cuyo mandato no duró mucho y fue sucedido por Pericles, que dominó Atenas hasta su muerte en el 429 a. C. Pericles continua la guerra contra Persia, en la que destacan dos decisiones que realizó, la primera la de solicitar a Cimón su vuelta del destierro y la segunda, la firma de un tratado de paz con Artajerjes I, el cual lo acepta, llamado Paz de Cimón en el 448 a. C. que estipula ciertas condiciones para ambos pueblos y que es presidido por éste, razón por la que fue mandado de vuelta del exilio, aunque realmente demostrado que fue presidido por Calias, ya que en el año del tratado, Cimón ya había muerto, por lo que se piensa fue realizado en su honor y recuerdo.

Las guerras médicas llegan a su fin mediante las condiciones impuestas por los griegos a los persas, a saber:
Obligación a los persas de desistir definitivamente en su conquista y expansión a Grecia.
No volver a navegar por el mar Egeo
Se les permite comerciar con las colonias griegas de Asia Menor.
Pero qué importancia tiene que los griegos hayan ganado las guerras médicas bueno pues muchas para la cultura occidental algunas de ellas son:
Se libero a la cultura Occidental (Grecia) del peligro asiático autoritario (Imperio Persa)
La ciudad-Estado de Atenas se convirtió en la ciudad más poderosa y rectora de los destinos del mundo griego.
 Los atenienses lograron el control marítimo del Mar Mediterráneo, formando asi un imperio marítimo que llevaría a Atenas a un notable progreso intelectual, artístico, económico y político "Siglo de Pericles".
 Las colonias griegas en el Asia Menor, recobraron su independencia del imperio Persa.

La fama del poder militar y predominio de Atenas, provocaría las Guerras del Peloponeso entre las ciudades-estado de Atenas y Esparta.
 El imperio Persa entraría en decadencia.

Se acentuó el espíritu democrático y patriótico del pueblo griego que, después, los pueblos del resto de Europa y Occidente habríamos de heredar.Y existe algo muy importante a rescatar que si los griegos no hubiese ganado las guerra medicas nosotros no fuéramos cristianos, asi que en gran parte hay que agradecerle el cristianismo a los griegos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario